"Llegamos a este día del recambio de un
gobierno municipal por otro, en una instancia que ha estado marcada fuertemente
por nuestra sociedad por la demanda de provocar un cambio.
¿Qué significa instalar un cambio que no
represente solamente reemplazo de hombres o de signo político?
Interpretar esta demanda es para mí asumir el
inicio de una etapa en la que deberemos atender el reclamo social de tener un
mayor grado de participación tanto de los ciudadanos en particular como de
nuestras instituciones. Mas apertura, mas integración del distrito, mas
transparencia en las acciones de gobierno y absoluta legalidad en las decisiones
de cada día.
Una tarea en la que la capacitación del
personal y de nuestros funcionarios permita una gestión mas moderna, mas ágil,
mas eficiente en la respuesta a las demandas de los vecinos.
Soy conciente que recibimos una
administración con una importante carga de personal, lo que desde el punto de
vista económico y administrativo significa que un 70% de los recursos que
ingresan por nuestras tasas y por coparticipación deben ser destinados a
salarios y cargas sociales.
Pero aun con esta dificultad, creo que peor
aun es que la sociedad percibe que muchos de esos empelados no tiene claros los
roles asignados, no realizan tareas que representen, mas allá de la prestación
de servicios, trabajos que signifiquen una posibilidad cierta de crecimiento
económico para nuestros pueblos o el mejoramiento de su calidad de
vida.
Será nuestra responsabilidad intentar un
cambio que esté signado por la integración del distrito. Que no se trata
solamente de tener mejores caminos, sino además que nuestros pueblos sientan su
pertenencia a un Adolfo Alsina que les brinda posibilidades desde lo educativo,
lo cultural, el deporte, el turismo y la atención de sus problemas.
Tengo claro que desde el primer día de esta
gestión habremos de afrontar fuertes responsabilidades que tienen que ver con
demandas insatisfechas, con servicios que no se prestan adecuadamente, con un
parque vial y de servicios deteriorado, con programas desfinanciados y con
varias obras y viviendas en marcha pero en algunos casos detenidas o con un muy
lento ritmo de ejecución.
Es por ello que resultará para nuestra
gestión de fundamental importancia poder establecer en muy corto plazo un
correcto diagnóstico de los elementos, obras y recursos económicos y humanos
disponibles que nos permita diseñar un programa de trabajo que empiece cuanto
antes a dar respuesta a las demandas que la sociedad nos plantea cada
día.
Formamos parte de un Distrito que tiene
fuertes potencialidades: aun perteneciendo a la zona marginal del sudoeste
bonaerense desde el punto de vista de la producción agropecuaria, nuestro campo
es una fuente de recursos y generación de actividad sumamente importante.
Contamos en lo local con un recurso económico a desarrollar con la utilización
de nuestras aguas mineromedicinales y con incipientes instalaciones industriales
que apoyaremos decididamente.
Tenemos a nuestro favor también un dato que
es realmente alentador: el 48% de nuestra población tiene menos de 35 años de
edad. Ello significa que potencialmente contamos con la vitalidad y las ganas de
generaciones jóvenes dispuestas a desarrollarse y crecer en su lugar si
encuentran los medios para hacerlo.
Es por eso que uno de nuestros esfuerzos
principales estarán orientados a una fuerte apuesta a la cuestión productiva: la
secretaría de producción y sus direcciones tanto en asuntos agrarios como en
comercio e industria deberán transformarse en impulsores de la radicación de
cuanta pequeña o mediana empresa esté dispuesta a instalarse en nuestro
territorio. Para ello habremos de generar las condiciones favorables de apoyo,
de acompañamiento para obtener créditos, facilitar trámites, de gestionar ayuda
y posteriormente orientar, guiar y apoyar esos emprendimientos para que sean
exitosos. Cada nuevo puesto de trabajo que generemos será una familia menos que
requerirá de un plan social y que mostrará que es posible a través de la
cultura del esfuerzo propio una mejor calidad de vida para ellos y para su
comunidad.
Pero al mismo tiempo que hablamos del
esfuerzo en lo productivo y la existencia de una población joven, la estadística
nos dice que nuestra población solo en un 20% ha concluido sus estudios
secundarios y que otro 20% no terminó la instrucción primaria.
Este dato representa para nosotros un fuerte
desafío: es necesario utilizar los recursos educativos que el distrito tiene en
su plenitud, pero al mismo tiempo venimos a ratificar el compromiso con la
capacitación, la educación, la cultura, las escuelas técnicas de profesiones y
oficios y la instalación de tecnicaturas y diplomaturas universitarias como las
que ya ha gestionado el gobierno que concluye con la Universidad del Sudoeste y
que habremos de impulsar decididamente con mas carreras, mas programas y el
contacto con otras casas de estudios.
El mismo esfuerzo quiero poner en el apoyo a
las actividades deportivas. Estoy convencido que el deporte representa una
oportunidad formidable para la formación de nuestros jóvenes y al mismo tiempo
una alternativa para alejarlos de las tentaciones adictivas de nuestra sociedad
moderna.
Permítanme expresar también algunas
definiciones dirigidas específicamente a los señores concejales, a los
funcionarios y empelados municipales y a nuestra población.
A los integrantes del H. Concejo Deliberante.
Muchos saben de mis actividades en lo político e institucional y por lo tanto
conocen que he integrado en algún momento el concejo deliberante de nuestro
Distrito y en dos oportunidades la legislatura provincial: ello ha creado en mí
la convicción que es en los cuerpos colegiados donde se halla la representación
plural de la opinión de los vecinos y es el lugar del debate de las ideas y las
inquietudes de los que aun viniendo de distintas extracciones políticas tienen
en común el objetivo de trabajar por la mejor calidad de vida de los habitantes,
tal como lo disponen las reglas de la democracia que por suerte vivimos ya hace
años en forma plena.
Quiero decir a los miembros del Honorable
Concejo Deliberante que habrán de encontrar en este departamento ejecutivo un
espacio dispuesto siempre al diálogo, a brindar la información y los lugares de
discusión necesarios para que finalmente sean los consensos los que nos ayuden a
gobernar y cumplir los objetivos que seguramente compartimos, aunque lo hagamos
desde distintos lugares políticos.
A los funcionarios municipales. A los
miembros del gabinete y delegados municipales que he designado y a aquellos de
carrera municipal que siguen en sus funciones o rotan a otras responsabilidades:
Iniciamos una gestión nueva, que como dije está marcada por nuevas
responsabilidades.
Confío en haber acertado con cubrir cada
espacio de la administración con la figura mas apta para ese lugar. A cada
funcionario otorgo mi confianza. Quienes me conocen saben que no soy centralista
ni absorbente en querer decidir todo, que delego responsabilidades, pero esa
forma de ser también significa que exijo a cada uno el cumplimiento al cien por
ciento de las responsabilidades que le delego.
Nuestra sociedad - y este intendente -
habremos de estar atentos al cumplimiento de las responsabilidades que cada uno
tiene. Ello requiere actitud de servicio, comprensión, dedicación, capacidad de
generar en el lugar que a cada uno le toca el acompañamiento del personal a su
cargo, de su capacitación y de lograr en cada sector del municipio, trabajos y
decisiones que cada día mejoren la calidad de vida de los
alsinenses.
A los empleados y obreros municipales.
Comprendo que cada cambio de gestión significa para el personal la expectativa y
la inquietud de saber que va a ocurrir con el trabajo de cada uno. Como dije
recién nos toca asumir en el escenario de un municipio con gran cantidad de
empleados y contratados.
Mi primer preocupación después del 23 de
octubre fue asegurar que el pago de salarios correspondientes al primer mes de
gestión estén asegurados.
Estoy convencido que habremos de mantener con
el personal y sus representantes un trato y diálogo permanente que nos permita
optimizar los recursos humanos con que contamos, capacitarlos, darles
oportunidades. En marzo próximo la Universidad del Sud Oeste inicia aquí la
diplomatura sobre gestión municipal que será una primera oportunidad para la
capacitación. Pero no será la única.
No solamente la administración requiere de
capacidades. El personal técnico, los conductores de máquinas y herramientas,
los profesionales. Todos necesitamos actualizar nuestros conocimientos sobre las
nuevas tecnologías para rendir mejor en nuestra tarea de cada día.
Quiero recordar al personal municipal que al
igual que los funcionarios, todos somos servidores públicos: Que nuestro
objetivo es la atención de la ciudadanía que paga nuestros sueldos para que
resolvamos sus problemas, para que les brindemos salud, servicios, cultura,
infraestructura….
Al personal de planta permanente y
contratados sumamos la existencia de las cooperativas sociales del Ministerio de
Desarrollo Social de la Nación cuyo financiamiento ha confirmado el ministerio
por los meses de noviembre y diciembre y cuya continuidad deberemos gestionar en
los próximos días, aunque sabemos que es decisión del gobierno nacional
modificar el sistema de funcionamiento de esos programas sociales por lo que
veremos como siguen a partir de enero.
No puedo dejar de citar al hablar de la
cuestión del personal sobre dos aspectos:
El primero es que ha habido en los últimos
tiempos modificaciones sustanciales de pases de contratos o Promes a planta
permanente: Ésta situación agrava a mi juicio la situación ya comentada de
sobrecarga de empleados por lo que habremos de revisar y adoptar decisiones en
los primeros días acerca de la legitimidad de eso cambios.
El otro aspecto al que quiero referirme no
solo comprende al personal y funcionarios sino a todo aquel que tenga una
relación laboral o comercial con el municipio: Una de las demandas mas
sostenidas por la sociedad en estos tiempos pasa por la necesidad de la
transparencia y la honestidad en los actos de la administración pública.
En este aspecto quiero ser concluyente: Puedo
aceptar o comprender, en última instancia, que un funcionario o empleado cometa
un error involuntario, una omisión, una falta por impericia, pero lo que de
ninguna manera estoy dispuesto a tolerar es la menor falta que tenga que ver con
el uso inadecuado de los recursos municipales, o la sospecha de que alguien se
beneficia en las adquisiciones, obras o acciones de la comuna, o peor aun que un
empelado o funcionario resulte responsable de sustraer bienes o recursos del
patrimonio municipal. Esa falta para mi es imperdonable y se castigará con el
máximo rigor ya le corresponda al funcionario mas cercano a mis afectos o al mas
lejano obrero de una delegación municipal.
Finalmente quiero expresar alguna reflexión
dirigida al pueblo de mi distrito: Soy conciente de la expectativa que este
cambio institucional genera. No vamos a rehuir ninguna de las responsabilidades
que nos corresponden o que hayamos comprometido en la etapa electoral. Solo
espero de mis convecinos la comprensión de que no todas las acciones pueden
generarse en los mismos tiempos.
Es mi decisión que las cuestiones que tienen
que ver con el cambio de actitud y transparencia se inicien mañana a las 7 de la
mañana. Igual actitud habrá para las acciones que apunten a empezar a recuperar
el estado de herramientas, de actividades en cada comunidad o de los programas
de educación y concientización vial que también iniciaremos esta
semana.
Para concretar uno de los aspectos de esta
decisión de transparentar recursos y acciones quiero anunciar la contratación de
una auditoria contable, técnica y administrativa que a partir de la próxima
semana habrá de trabajar para que queden perfectamente deslindadas las
responsabilidades de la gestión que concluye y la que comienza.
Sin embargo, mas allá de toda nuestra
voluntad, habrá decisiones que requieren gestión, recursos, proyecto técnico,
cambios en los sistemas de carácter social y de salud que habrán de demandar
otros tiempos: para ello cuento con la comprensión y colaboración de nuestra
gente a fin de que las demandas de lo urgente no nos impidan ver las necesidades
de resolver lo importante.
Hago expresos deseos y pido a Dios la
sabiduría y la decisión para que al concluir esta tarea nos sea posible dejar
una sociedad mas justa, mas integrada, que premie la cultura del esfuerzo y el
trabajo con compromiso, respeto, justicia y solidaridad.
Que podamos sentir que nuestras comunidades
han percibido una gestión próxima a sus necesidades, con capacidad de resolver
sus problemas a través de un equipo que muestre compromiso y vocación de
servicio.
Gracias. Muchas gracias por acompañarnos en
este momento.
Reciban todos mi reconocimiento, mi
compromiso y mi afecto.
DAVID ABEL HIRTZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario